Dark Skies (2013)

De los productores de Paranormal Activity e Insidious...

Dark Skies nos cuenta la historia de Lacey (Keri Russell), una vendedora de casas que no puede vender casas y Daniel (Josh Hamilton) que no tiene trabajo, un matrimionio de clase media con serios problemas económicos y dos hijos, Jesse (Dakota Goyo) y Sam (Kadan Rockett). Por si esto fuera poco, comienzan a pasar cosas inexplicables en su casa. Algo o alguien se come sus vegetales, deja las sobras tiradas en el suelo y reacomoda la cocina al estilo de poltergeist, aprecen formas misteriosas en el techo, todos los sensores de la alarma se activan al mismo tiempo, las fotos familiares desaparecen y cientos de pájaros se estrellan en su casa. Y se pone peor, todos sufren desmayos, pierden horas de su vida, les sangra la nariz y en sus cuerpos aparecen marcas locas. Un caso mas para los Warren, pero con un twist...

Así es, Aliens. Desde que aparecen los círculos en la cocina y el niño hace dibujos con unos "amigos" que sólo él puede ver, puedes imaginar de que se trata. Lacey comienza a investigar sobre el tema y casi arrastra a su marido a ver a Edwin Pollard (J.K.Simmons), un "especialista" en encuentros con alienígenas. Este, les hace un pequeño examen, para saber si de verdad están siendo atacados por hombrecitos verdes. El test da positivo para hombrecitos grises, el tipo más común de alienígenas.

Pollard les dice que la invasión alienígena tiene muchísimos años y están entre nosotros, pero uno no se da cuenta hasta que van a robarse a uno de los hijos, aquel con el que hayan tenido contacto primero. Pobre Sammy. ¿Qué tenemos de especial? Preguntaba Lacey. Absolutamente nada, no son especiales. Es totalmente aleatorio. Quizás no es la respuesta que ellos o el público hubieran querido, pero a veces es mejor así.

Por alguna razón, ellos entendieron que esa misma noche pretendían llevarse a su niño y van directo a su casa a encerrase para protegerlo. Unas tablitas por aquí, un cuchillito acá, una escopeta y vámonos recio. Pues sí, justo el 4 de Julio llegan los alienígenas y la familia tiene un encuentro con ellos. ¿El final? No lo voy a contar, pero puedo decir que no es un final feliz, eso es lo bonito.

Hubo intención de hacer algo un poco diferente, hay que aceptar eso, pero es casi imposible no compararla con Signs, del buen Shyamalan (cuando era bueno, claro, no como After Earth), incluso aquí optan por no mostrar directamente a los invasores. En la película, la familia instala cámaras para ver que sucede por las noches, y gracias a eso la llaman "Paranormal Activity con aliens", pero no creo que sea tan mala como alguna de ellas.

No la vas a ver en el cine porque ya la quitaron, pero si la encuentras por ahí, es buena opción para un domingo flojito, obviamente sin tener muchas expectativas.

Escrito por: Filiberto García -